tercer día

Aquí seguimos, todos y contentos. Con un tiempo que se está portando de cine y unos chavales que se están portando mejor aún.

Al punto de mañana nos hemos ido a Portobello, emblemático mercadillo callejero, lleno de encanto y curiosisidades.

De allí nos hemos bajado a la Torre de Londres, pasando por el estadio del Chelsea a coger las entradas para el Lunes, que nos caía casi de paso ... Trescientascincuenta paradas de metro después, hemos llegado y, si ayer vimos la torre desde el rascacielos, hoy la hemos visto por los cuatro costados, parando a el obligado posado, postureo, selfie, etc delante del puente más bonito del mundo.

Unos paseos por el pintoresco entorno de muelles reconvertidos en zonas de recreo y marina, y ya nos hemos ido hacia la London Eye. Suponíamos que habría mucha gente.  Nos equivocamos. Había mucha más! Pero al final, todos arriba, y de nuevo, espectaculares panorámicas de Londres al atardecer.

Y con esto y un bizcocho..., con casi 16 kms más pateados y la tira más en metro ...

mañana más.